terça-feira, 17 de março de 2009
Marruecos libera a Rachid Sgheir.
17 de Março 2009
EL DEFENSOR SAHARAUI DE DERECHOS HUMANOS, MIEMBRO DEL COMITÉ CONTRA LA TORTURA EN DAJLA (VILLA CISNEROS – SAHARA OCCIDENTAL) CCTD, RACHID SGHEIR, HA SIDO LIBERADO DESPUÉS CASI 24 HORAS DE RETENCIÓN, DURANTE LAS CUALES FUE SOMETIDO A TORTURA Y OTROS TRATOS CRUELES Y DEGRADANTES DURANTE SU SECUESTRO.
El 12 de marzo de 2009 había grabado con su cámara de video las actuaciones de intimidación y chantaje a varios turistas españoles por parte de la policía marroquí siendo perseguido por ésta en un primer intento de secuestro.
El 13 de marzo de 2009, viendo que su casa estaba cercada por agentes de las fuerzas de ocupación, Rachid Sgheir acudió al tribunal de primera instancia para denunciar la persecución y el intento de secuestro del que fue objeto el día anterior. Sin embrago, apenas había entrado en la sede judicial fue secuestrado, a la 3:30h, por varios agentes marroquíes, entre ellos el Director de la seguridad en Dajla, Hreiz Larbi y el Director del departamento de seguridad territorial (DST) en Dajla.
Contactado por el CCTD, Rachid Sgheir relata que le pusieron una venda sobre los ojos y le ataron las manos y fue llevado en coche, con matrícula privada, hacia la comisaría central de Dajla donde inmediatamente empezaron a torturarlo y maltratarlo. Cuando, a alrededor de 18H30, llegó el denominado Hreiz Larbi, le quitaron la venda. Este último se dirigió al defensor saharaui diciendo que quería que lo viera perfectamente puesto que había recibido órdenes de altas esferas, en referencia al rey. Hreiz Larbi le dio una patada en el ojo que le hizo perder la conciencia. Le echaron agua y lo arrastraron hasta la celda. Hreiz Larbi ordenó a los agentes que quitaran de la celda las mantas que allí había, que llenaran la celda con agua y que apretaran las esposas sobre sus muñecas, recalcado que se trataba de un enemigo de la patria que no merecía ninguna piedad. Al mismo tiempo, amenazó a cualquiera que le diera una gota de agua.
Al día siguiente, a las 7H de la mañana, cuatro agentes vinieron y llevaron a Rachid hacia una sala en la misma comisaría donde procedieron, bajo supervisión de Hreiz Larbi, a interrogarle bajo la amenaza de tortura. Le preguntaron sobre sus actividades, las relaciones que tiene con otras organizaciones particularmente internacionales, qué contactos tiene con otros defensores saharauis de derechos humanos, le preguntaron también sobre la contraseña de su correo electrónico y obligándole a firmar un informe policial sin poder leer su contenido. Después, hacia las 15H, se le llevaron al tribunal de primera instancia donde compareció ante el procurador del rey. Rachid denunció las vejaciones a las que fue sometido y que había firmado un documento por la fuerza, sin saber su contenido. El procurador procedió a su liberación inmediatamente, sin responder a sus quejas.
Cabe recordar que el defensor Rachid Sgheir, miembro del Comité Contra la Tortura en Dajla, Sahara Occidental, había sido objeto en varias ocasiones, de detenciones arbitrarias, de tortura y de intimidaciones por parte de las autoridades marroquíes por su implicación en la defensa de los derechos humanos y su condena del expolio ilegal de los recursos naturales del Sahara Occidental por Marruecos. Recientemente fue objeto de detención durante la visita de la delegación ad hoc del parlamento europeo que acaba de publicar su informe donde insta a Marruecos de respetar los derechos humanos en la parte del Sahara Occidental bajo su ocupación.
El Comité Contra la Tortura en Dajla, Sahara Occidental, condena las actuaciones criminales llevada a cabo por el denominado Hreiz Larbi (uno de los perseguidos en la querella criminal interpuesta por varias organizaciones saharauis de derechos humanos ante la Audiencia Nacional española por genocidio y tortura contra el pueblo saharaui) y otros agentes marroquíes y pide a los organismos internacionales de derechos para intervenir ante las autoridades de ocupación marroquíes para:
- el enjuiciamiento de los responsables de la tortura y otros tratos crueles, inhumanos y degradantes llevados a cabo por Hreiz Larbi y sus cómplices contra el defensor saharaui Rachid Sgheir.
- el fin de la represión marroquí contra la población civil, en general y contra los defensores saharauis de derechos humanos.
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